Siempre te recordaré 2
Hoy quiero contarte, que siempre quise ser, el gran protagonista de mis sueños e ilusiones, compartiéndote este relato corto y sintético, de la infancia, humilde y feliz, que me tocó vivir. Pero para entender esta segunda parte, debes leer la primera, que lleva igual título, con fecha 25/06/2011. Estoy seguro, que en su contenido podrás entender, que siempre detrás de un gran hombre, hay siempre una gran mujer. Pues bien; Esa primera gran mujer, fue mi madre. Era toda una princesa, rubita, linda, cariñosa, y muy celosa del testimonio y de sus hijos. Si se enteraba de algo malo que yo hiciera, en seguida me corregía, para evitar una formación ajena, a la verdadera conducta que debía tener.
Recuerdo, que nuestros vecinos, nos querían mucho, y siempre acudían, a nuestra casa, en busca de ayuda y consuelo. Por las tardes, al volver a casa, mis padres sonreían contentos, y era allí, cuando yo me acercaba despacito a ella, la abrazaba, la acariciaba, y le decía despacito, como rogándole “Me podes dar un besito, dame un besito, uno solo”. Entonces ella, se reía y me decía, “salí, salí”, pero en realidad, quería dármelo, solo, que le gustaba, que yo se lo pidiera. Luego cuando me lo daba, le pedía otro, y otro, y así, cuando ella se emocionaba, yo le decía, te quiero mucho, y vos ¿me queres? Entonces ella me abrazaba, y me decía, si, te quiero. Hoy que ambos están presentes al Señor, los extraño mucho.
Como veraz mi princesita bella y querida, nos dejó, el día 22/02/2010. Se fue, para reunirse con el Señor y con mi Papi, que también partió a las moradas eternas el 22/02/2000, en idénticas circunstancias. En ambos casos llovía torrencialmente, pero igual fueron sepultados, y los hermanos, vecinos y amigos, reunidos, en amor y comunión, cantaron himnos de loor al Señor, de nuestras vidas y proclamaron, “Donde está oh muerte tu aguijón, y donde oh sepulcro tu victoria”. Luego de sus partidas, caminamos por el mundo tratando de honrar, al Dios, que nos amó, al punto de darnos a su hijo, para que muriera en nuestro lugar, pagando el precio de nuestro rescate, con su sangre preciosa.
Hoy cuando pienso en todas las cosas grandes que sucedieron a mí alrededor, me pregunto: ¿Dónde estarás Tú? Que también jugabas a ser la Mujer maravilla, la Mujer biónica, o tal vez, la Dra. Más sabia de todo el Hospital Central. ¿Serás una mujer maravillosa, Hermosa, bella e inteligente, como yo te pensé? Yo creo que sí! Porque pienso que eres como el sueño profundo, que todos quisieran tener, para admirar tu belleza, tu valor, tu candidez, tu ternura, tus palabras de apoyo, y amor sincero; Iluminando lo oscuro de la soledad, con la luz de tus ojos, brindando alegría con el sonido de tu voz, y provocando suspiros, con tu presencia, tierna, delicada y sencilla.
Siendo la gran mujer, heroína principal, de una gran historia de amor, para ser feliz en todos tus días grandes, como lo fuiste, en tus días niños; Creciendo y envejeciendo al lado de un gran amor, que te escriba, los más bellos Poemas y cartas de Amor, que un enamorado, puede plasmar, con la convicción, de sentirse querido y amado, por el ser más sensible, tierno y soñado en lo profundo de su corazón. Verte reír y correr, por toda la casa, como la reina del hogar, con todos los bajitos, correteando a tu alrededor, para acariciar tu rostro, abrazándote y besándote, para premiarte con sus caricias, nacidas de un corazoncito, que se siente feliz de saber que existes, y eres del Papá, su más bella inspiración.
Estoy seguro que eres, como esos tesoros de valor incalculables, que no hay precio o dinero, que los pueda comprar, porque están reservados, solo para aquel que los ama y aprecia de verdad. Nunca dejes de darle las gracias a Dios, por privilegiarte con tanta dicha, belleza y felicidad, porque sin duda te traerá aparejado muchos días hermosos y felices. Tampoco dejes de recordar, que siempre serás, la Inspiración y la motivación, la razón y la explicación, de todas las preguntas; Siempre serás la multiplicación del amor y no la resta, la alegría que perdura, la letra de la canción más bella, que aun no se escribió, y la rosa más hermosa del jardín, con los días más bellos para vivir.
Hoy como ayer, te conté parte de mi infancia y de mis afectos, con los cuales me siento feliz. También he reído, llorado y pensado en Ti, con la esperanza, de que un día, sonrías feliz.
Autor: Pablo E. Castillo
POS DATA: Dedicado con todo mi afecto, para todos aquellos, que de una u otra manera gusten de este humilde escrito. DTBM
He reído y me he gozado con tus anécdotas de niño, me hicieron recordar la mía. Vivencias lindas, e irrepetibles momentos inolvidables que han quedado en el ayer . ¡Que tiempos aquellos…. diría mi abuelita!
Ten la certeza que eres y serás el gran protagonista de tus mas anhelados sueños e ilusiones y los veras cumplirse uno a uno, pues de seguro encontraras a esa mujer anhelada y será mucho mejor de lo que te has imaginado. Que no ha sido poco eh!!!! Jejeje. Sin duda esa personita espera x ti con ansias en algún lugar del mundo para compartir contigo ese lindo y hermoso sueño. y sus corazones hablaran el lenguaje del amor y se fusionaran sus almas en un solo ser.
Dios te siga Bendiciendo a ti también.
Querida Mónica, sinceramente no tengo mas que palabras de agradecimiento para Ti, por tu comentario vertido en esta oportunidad. Tus palabras me llenan de alegría, y de emoción, porque al leerlas, me hacen pensar, solo eso, pensar, en ese ser tan bello, tan Hermoso, y tan especial, que para mi es como una estrella, que esta muy alejada, y solo puedo mirarla y admirarla a la distancia. En cuanto a ella, siempre fué la figura estelar, la que acapara todas las miradas y provoca el llanto o la alegría, por eso dije, “Tu que solías vestirte”, no es la ropa, sino ella misma como esencia de la inspiración. Finalmente, si algun día tienes oportunidad de ver la Película “Corazón de caballero”, podrás entender, porque escribí el Poema “Un día sin verte”. Deseo lo mejor para Ti, y para los tuyos, DTBM